Procedimientos de diagnóstico
- Procedimientos de diagnóstico
- Apnea del sueño
- Caminata de 6 minutos
- Cardiografía por impedancia
- Cardioversión eléctrica
- Cardio-oncología
- Clínica de falla cardíaca
- Clínica de marcapasos, cardiodesfibriladores y resincronizadores
- Doppler Carotídeo
- Doppler venoso y arterial de miembros
- Eco Strain
- Eco transesofágico con sedación
- Ecocardiograma con contraste
- Ecocardiograma Doppler a color
- Ecocardiograma mecánica ventricular
- Escleroterapia
- Flebectomía ambulatoria
- MAPA (Monitoreo de presión arterial)
- Monitor de eventos
- Monitoreo Holter
- Prueba de esfuerzo
- Prueba de inclinación (Tilt test)
- Rehabilitación cardíaca
- Safenectomía por láser
- Safenectomía por radiofrecuencia
- Safenectomía quirúrgica
- Stress Eco con Dobutamina
- Stress Eco en Banda
¿Qué la cardio-oncología?
El cáncer y las enfermedades cardiovasculares pueden coexistir en un mismo paciente debido a la presencia de factores de riesgo comunes (tabaquismo, sedentarismo, obesidad, diabetes, hipertensión arterial, dislipidemia).
La cardiotoxicidad aparece hasta en un 30% de los pacientes que tienen tratamiento oncológico (quimioterapia y radioterapia). Se trata de una complicación grave que habitualmente debuta como insuficiencia cardiaca.
El espectro de los efectos cardiovasculares adversos de los tratamientos oncológicos incluye la disfunción del ventrículo izquierdo, insuficiencia cardiaca, síndrome coronario agudo, hipertensión arterial, alteraciones del ritmo cardiaco, enfermedad tromboembólica, valvulopatías y enfermedad pericárdica.
Es indispensable el trabajo interdisciplinario (oncólogo, hematólogo y cardiólogos) para el abordaje adecuado que permitan prevenir y/o revertir el daño cardiovascular.
Es muy importante resaltar que en el manejo de estos pacientes lo más importante es no suspender el tratamiento oncológico ya que este es el que los puede salvar de un pronóstico adverso. El objetivo principal de la cardio-oncología es de prestar una asistencia cardiovascular integral a los pacientes con cáncer desde su diagnóstico hasta la supervivencia posterior. Para ello es necesario una adecuada estratificación de riesgo cardiovascular previo al inicio del tratamiento y un seguimiento durante y posterior al mismo.
